El agua que obtenemos en nuestras casas o industrias a través de la red general, normalmente está tratada químicamente para su potabilización, pero ello no implica que determinadas algas o bacterias puedan desarrollarse o reproducirse. Microorganismos como el E. Coli, Cryptosposium y Gardia pueden incorporarse a la red general de aguas y dada su resistencia al cloro, pueden originar infecciones importantes en nuestro organismo.
Un buen sistema para combatir este tipo de contagios es la esterilización de aguas mediante rayos UV. La radiación con este tipo de luz ultravioleta provoca una mutación en el ADN de estos microorganismos impidiendo su reproducción. Además este haz de luz destruye algas y protozoos en su mayoría perjudiciales para nuestra salud.
La magnitud de la radiación va en función del grado de turbiedad del agua a tratar, por lo que es importante un análisis previo a la instalación de su equipo.
Si aplicamos una longitud de onda de como mínimo 254 nanómetros, alcanzaremos el máximo de absorción de los microorganismos expuestos provocaremos la inaccciónirreversibles en el crecimiento y reproducción de los patógenos perjudiciales para la salud humana.
La desinfección del agua mediante luz UV tiene numerosas ventajas, la principal es su inocuidad. El agua tratada no altera su composición o propiedades a diferencia de los sistemas químicos como puede ser el cloro.
La esterilización con UV, deja el agua libre de bacterias sin modificar su pH, ni su sabor u olor.
Además la instalación de un equipo esterilizador no suponen un coste elevado, como tampoco es gravoso económicamente su mantenimiento.
Tan solo una restitución de la lámpara una vez al año, ya que aunque puede funcionar durante mucho más tiempo, la intensidad de su luz decrece con el paso del tiempo y como consecuencia su efectividad se ve mermada.
En Aquasalud podemos dar solución al problema de esterilización de sus aguas, tanto a nivel doméstico como industrial. Nuestra experiencia le aportará la solución ideal para su caso. Contacte con nosotros.
Además, es un método muy rentable en el tratamiento de agua, ya que se produce en el sitio y no requiere el transporte y almacenamiento de productos químicos peligrosos. Una vez que se ha desintegrado, no deja sabor u olor en el agua potable.
Industrialmente, el ozono se utiliza para:
Muchos hospitales de todo el mundo lo utilizan para descontaminar los quirófanos entre cirugías. Las habitaciones se limpian y luego se sellan herméticamente antes de ser llenado con el ozono que mata o neutraliza todas las bacterias restantes.
El ozono puede ser utilizado para desintoxicar residuos de cianuro (por ejemplo, de extracción de oro y plata) por oxidación de cianuro a cianato y finalmente en dióxido de carbono.